Pieles grasas

La piel grasa es uno de los tipos más generalizados, sobre todo por los momentos de estrés que estamos experimentando. La piel grasa se traduce en un exceso de sebo que se hace visible en frente y nariz. Las causas más comunes suelen ser la alteración de las hormonas, la mala alimentación, el clima, la genética o una elección errónea de los cosméticos. Mantener una correcta rutina indicada para ti con productos para piel grasa te ayudará a regular y equilibrar tu piel.
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Piel Grasa: causas y cómo balancearla

La piel grasa se caracteriza por un exceso de producción de sebo. Existen diferentes causas, como cambios hormonales o hábitos diarios, que pueden contribuir que tengas una piel grasa y propensa al acné.

Hormonas

Los cambios hormonales desempeñan un papel crucial en la producción de sebo. Durante la pubertad, antes de los períodos, durante el embarazo y con la menopausia, las hormonas pueden estimular un aumento en la producción de sebo. El estrés y ciertas enfermedades también pueden causar desequilibrios hormonales, contribuyendo así a la piel grasa y al acné.

Dieta

La ingesta excesiva de grasas, carbohidratos procesados, azúcar y productos lácteos puede desencadenar brotes de acné en personas con piel grasa.

Clima

El clima caluroso y húmedo puede estimular la producción de sebo, haciendo que la piel se vuelva más grasa, especialmente durante los meses de verano.

Genética

La predisposición genética también juega un papel importante. Algunas personas simplemente tienen una tendencia innata a producir más sebo. 

Limpieza excesiva

Lavar excesivamente la piel, especialmente mediante la exfoliación, puede despojarla de su sebo natural, llevando a una sobreproducción para restaurar el equilibrio.

Uso de cosméticos inadecuados y medicamentos

El uso de productos o maquillaje a base de aceites puede obstruir los poros, aumentar el brillo y provocar acné en piel grasa. Además, algunos medicamentos recetados pueden causar deshidratación, causando una mayor producción de sebo como compensación.

Rutina de Cuidado para Piel Grasa: Pasos Esenciales

La clave para el cuidado de piel grasa se basa en una rutina para piel grasa adecuada y productos correctos.

Paso 1. Limpieza

Lava tu rostro con un producto específico antes de acostarte y al despertar. La limpieza es fundamental para eliminar el exceso de sebo y las impurezas.

Paso 2. Tónico

Usa un tónico para cerrar los poros y equilibrar el pH, especialmente beneficioso para las pieles grasas.

Paso 3. Exfoliante:

Exfolia la piel dos veces por semana para limpiar los poros y eliminar toxinas. Selecciona un exfoliante que se adapte a tu tipo de piel.

Paso 4. Crema hidratante

Aunque la piel grasa puede estar deshidratada, elige hidratantes sin aceites y emulsiones reguladoras de la producción sebácea.

Paso 5. Protector solar

La protección solar es esencial, incluso para pieles grasas. Opta por protectores específicos para piel propensa al acné.

Ingredientes Clave en Productos para Piel Grasa

- Retinal: Conocido por sus propiedades antienvejecimiento, el retinol acelera la renovación celular y ayuda a eliminar células muertas.

- Niacinamida: La vitamina B3 calma la inflamación, aumenta la producción de colágeno y controla la producción de grasa.

- Arcilla: Un imprescindible para absorber el exceso de grasa y dejar la piel suave y mate.

- Aceite de cáñamo: Seborregulador y antiinflamatorio. 

Cómo Reducir el Acné en Piel Grasa

Es muy importante evitar tocar tu piel grasa para evitar infecciones y marcas en la piel. Evita rascar, apretar o frotar los comedones.

Elige tratamientos para acné adecuados y respetuosos con tu piel. Evita productos abrasivos y utiliza productos para piel grasa libre de tóxicos

Hábitos Diarios para Controlar la Piel Grasa

- Limpieza Regular: Limpia tu cara mañana y noche, así como antes y después de hacer ejercicio, utilizando siempre un limpiador con propiedades hidratantes y no astringentes, como se suele creer.

- Protector Solar: Usa protector solar siempre que salgas, especialmente al aire libre.

- Hábitos Alimenticios: Bebe suficiente agua, reduce los alimentos azucarados y lácteos, y mantén una dieta equilibrada, rica en alimentos integrales.